Entrevista a José Ramón Parrado, Alcalde de Casariche

Casariche está situada a 122 kilómetros al sureste de Sevilla y cuenta con una población superior a los 5.000 habitantes (5.305 en 2023)

Su término limita en la provincia con Estepa al noroeste, Lora de Estepa al oeste, La Roda de Andalucía al sur y Badolatosa al este. Limita al norte con el término de Puente Genil (Córdoba) y al sur con el de Alameda (Málaga). La estructura urbanística de la villa viene determinada por dos elementos que han determinado su crecimiento y desarrollo hasta el momento actual, estos son el cauce del río Yeguas y la vía férrea. El núcleo originario se ubica sobre la margen izquierda del río, formando una trama urbana bastante ortogonal.

Casariche y Badolatosa han sido dos bastiones de la izquierda durante la lucha antifranquista. Cuando acabó la dictadura resultaron elegidos alcaldes del Partido Comunista por una amplia mayoría. Los hermanos Romero fueron alcaldes de Badolatosa por mucho tiempo.

El primer acalde de Casariche después de la muerte de Franco también fue del Partido Comunista. Posteriormente se alternaron alcaldes de Izquierda unida y PSOE, uno de ellos el padre del actual alcalde, José Ramón Parrado Cano, que falleció al año de desempeñar el cargo, siendo sustituido por Eladio Lozano Jurado, ambos militantes del PCE.

José Ramón Parrado Borrego es alcalde de Casariche por Izquierda Unida desde las elecciones municipales del pasado 28 de mayo de 2023. En dichos comicios, la candidatura del actual alcalde obtuvo el mayor porcentaje de votos (72%), siendo de los alcaldes más votados de España, un porcentaje jamás alcanzado por ningún otro después del franquismo. Diez de los trece concejales que componen el consistorio pertenecen al grupo municipal de Izquierda Unida, los tres restantes del PSOE. Tiene 43 años, está casado sin hijos, es profesor de autoescuela y escucha rock.  

La Voz de Morón. Ya lleva un año desempeñando la responsabilidad de ser alcalde de Casariche, ¿cómo ha vivido este periodo tan significativo de su vida?
José Ramón Parrado. Bastante bien. Yo llevo 17 años como concejal, antes de presentarme llevaba 16 en el ayuntamiento. Es algo que llevo viviendo desde pequeño, ya que mi padre fue alcalde hace 20 años, y ahora mismo estoy desempeñando algo que yo quería hacer desde chico. Es como un sueño hecho realidad, el poder dedicar años de mi vida a trabajar por mi pueblo y por mi gente.

LVM. ¿Qué problemas más importantes tiene ahora el ayuntamiento de Casariche?

J.R.P. Al entrar, nos hemos encontrado 6 millones de euros de deuda. Desde que entré como alcalde el 17 de junio, el mismo día del pleno de investidura, lo primero que tuve que hacer en el pueblo de Casariche fue tratar el tema del agua. Se había quedado el pozo principal sin agua. Llevamos un año con unas restricciones de agua grandísimas. Tenemos agua desde las 8 de la mañana hasta las 3 de la tarde. El resto del día, el pueblo entero se queda sin agua. Cuando entramos, el primer mes, estuvo el 40% del pueblo sin agua ninguna, y estuvimos repartiendo agua casa a casa durante 15 o 20 días. Después estuvimos peleando para poder abastecernos de una infraestructura que pusieron en un pueblo vecino, en Badolatosa. Se trata de una planta de agua en el río, llamada Malpasillo. Esta fue la primera solución parcial que buscamos. Ahora se está haciendo una obra desde la Sierra de la Cruz, cuya infraestructura está casi terminada, y que nos dará agua las 24h del día.

LVM.¿Cómo crees que gestionó el equipo de gobierno anterior?

J.R.P. Imagínate, 6 millones de euros de deuda, y el problema del agua. Esto es algo que desde la oposición llevábamos muchos años diciendo que debían buscar vías alternativas porque ya estudios estaban demostrando que el acuífero estaba bajando y estaba bajo mínimos. Todos los pueblos de la comarca que se abastecían de ese mismo acuífero buscaban soluciones alternativas, menos Casariche. Al llegar, lo que nosotros llevábamos avisando años, como es lógico, pasó. Se quedó el pueblo entero sin agua, y llevamos un año intentando paliar esa solución.

Aparte de la deuda y del agua, había una desorganización grandísima en el ayuntamiento. Tenemos, por ejemplo, el capítulo uno, que son las nóminas que se le pagan a los trabajadores, y que supone más del 80% del presupuesto del ayuntamiento, lo que hace que afrontar el resto de gastos sea prácticamente imposible, y sea muy complicado poder dar servicios a los ciudadanos. Una de las primeras medidas que he tenido que tomar al llegar es subir los impuestos. Yo en campaña lo dije porque sabía la situación económica del ayuntamiento. Fui coherente y  dije que posiblemente tuviéramos que subir los impuestos para poder cuadrar las cuentas. Esos 6 millones de euros de deuda se componen en un remanente negativo de 3 millones 600 mil euros, más dos préstamos a largo plazo que sacaron para poder ir pagando las nóminas, uno a 2032 y otro hasta 2036. Han dejado hipotecado por completo el futuro de los casaricheños. Al tener el remanente negativo, no podemos optar a muchas subvenciones de la Junta o de Diputación. Yo he prometido que si en estos 4 años soy capaz de bajar el remanente negativo, los impuestos los vuelvo a poner donde estaban, los vuelvo a bajar.

LVM. Todavía es pronto para hacer un balance de los objetivos electorales que planteasteis en vuestra candidatura, pero, ¿podrías decirnos en qué estado de realización se encuentran algunos de los principales objetivos y las dificultades, si las ha habido?

J.R.P. En campaña dije que no le prometía al pueblo de Casariche absolutamente nada hasta que viera el estado de las cuentas, porque sabía que la situación económica era nefasta. Fui claro con mi pueblo. Aun así, estamos  haciendo un montón de cosas.

Una de las cosas principales que yo quería hacer, que es ampliar el polígono industrial, no me la permite la ley urbanística, porque en Casariche el plan general de ordenación urbana, no estaba ejecutado, algo que casi todos los pueblos de la comarca lo tienen hecho. La ley no te permite hacer nada mientras no tengas el plan básico en marcha, no te permite modificaciones puntuales de suelo. Ya estamos en ello [ejecutarlo]. Hemos conseguido una subvención de Diputación de 200 mil euros. No podemos ampliar el polígono industrial ni los planes residenciales, para poder dar solares y viviendas al pueblo.

También estamos luchando por la depuradora, que está en desuso. Se averió en 2018, y desde entonces está parada. Hemos pagado más de 230 mil euros de denuncia, desde 2018 hasta ahora, por verter directamente al río, y es otra de las cosas que estamos luchando por reactivar. Estos cuatro años van a ser para subsanar la mala gestión del equipo de gobierno anterior. Aparte, vamos a embellecer ahora todas las entradas del pueblo. También había muchos edificios en desuso, como el salón de uso múltiple del polideportivo.

LVM.¿Cuál es el comportamiento de los concejales de la oposición?

J.R.P. Es prácticamente nulo. La que era candidata en las elecciones, dimitió al día siguiente de las elecciones. La número 2, que se quedó como número 1, dimitió al mes y algo, y ahora mismo quedan 3 personas, que nunca han estado en política, y en los plenos me dicen por ejemplo que dónde está la varita mágica para quitar la deuda, cosa qué es mentira. Yo no prometí nada hasta que no viera las cuentas. La oposición lleva un año sin hacer nada, simplemente asisten a algunos plenos, pero ya está. De hecho, en el pleno de investidura, uno de sus concejales me votó (yo tengo 10 concejales y ellos 3).

LVM. Hemos hablado del abastecimiento de agua, pero la Sierra Sur también tiene carencias respecto a la sanidad, los transportes… ¿qué actuaciones tienen pensadas para afrontar estos problemas?

J.R.P. Con respecto al agua, estamos ahí conectados a Malpasillo. Respecto a la sanidad, somos también la comarca que está peor de Andalucía. A la zona básica de Estepa le pertenecen 41 médicos, y ahora mismo tenemos 17. Tenemos menos del 50%, y nos consta que ya 5 médicos más han pedido el traslado, por lo que en Septiembre nos quedamos con 12 médicos de 41.

A Casariche le pertenecen 3 médicos y un pediatra y desde hace un año tenemos un sólo médico. Llevamos un año continuo de manifestaciones y concentraciones. Se ha decidido que los 24 alcaldes de la zona de Osuna nos vamos a encerrar en Diputación el 10 de julio. Van a ser 24 horas por la Sanidad pública.

Respecto a los transportes, también tenemos una deficiencia grandísima, porque en Casariche, desde hace 15 o 16 años, el tren Málaga-Córdoba ya no funciona con pasajeros, sólo funciona con mercancía, y estamos luchando a través de la Plataforma del Tren Rural de Andalucía para la reactivación de la línea Córdoba-Málaga.

Casariche ha perdido 300 habitantes en 4 años por la despoblación de las zonas rurales. Estamos a una hora de Córdoba, Sevilla, y hora y cuarto de Granada. Estamos muy bien situados pero muy lejos de todas las capitales, y si no tenemos medios de transporte, si no tenemos sanidad, si no tenemos agua, si no tenemos posibilidad de ofrecer vivienda porque las leyes urbanísticas y las subvenciones de la Junta no lo permiten, estamos abocados a que las zonas rurales poco a poco vayan desapareciendo.

LVM.¿Cuáles son las relaciones con la Junta de Andalucía?

J.R.P. Me reciben bien, pero cuando hablamos de que me den algo, las relaciones son malas. En todas las delegaciones, cuando te sientas en la mesa, te dicen “Alcalde,  no hay un duro”.

LVM. ¿Te gustaría añadir algo más?

J.R.P. Se han conseguido 6 cursos de formación y empleo, y vamos a dar 100 puestos de trabajo durante este año. Somos el pueblo de Andalucía por habitante con más cursos de formación y empleo, y estamos luchando por la apertura de una estancia diurna.

Hemos hecho la solicitud por la apertura de un CAIT, un Centro Infantil de Atención Temprana para los niños con discapacidad en Casariche, para el cual ya estamos construyendo el edificio que lo albergará.

También estamos trabajando con Avra (Agencia de Vivienda y Rehabilitación de la Junta), para que 60 solares que tenga en propiedad la Junta de Andalucía aquí en Casariche, se destinen para que construyan ellos viviendas sociales o nos los cedan para poder construir nosotros las viviendas.

También tenemos un plan parcial residencial número 1, y estamos trabajando para modificar el suelo de urbano a industrial para poder hacer la ampliación del polígono industrial.

Estamos modificando la infraestructura de agua. Casariche tenía muchas calles con tuberías de material cancerígeno, y se han modificado todas las calles que las tenían. Se han arreglado 9 calles y se han cambiado por tuberías adecuadas a la normativa.

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