Asesinato policial del menor Nahel M: rebelión en toda Francia, miles de detenidos y entierro multitudinario en Nanterre





Nahel M. tenía 17 años. Murió a manos de un policía por un disparo en el tórax a quemarropa en un control de tráfico el martes pasado, porque conducía sin carnet y trató de huir. Su asesinato ha provocado una ola de indignación en Francia y una escalada de protestas contra la violencia y el racismo institucional. Se han registrado más de dos mil trescientos detenidos, de los que un 30% son menores de edad y cuya media de edad es de 17 años.

La rebelión juvenil es en toda Francia. Este sábado se han repetido intensos enfrentamientos en Marsella. En las imágenes que circulan en redes sociales se ve a la policía usando gas lacrimógeno contra las personas en la ciudad; y los vídeos muestra los enfrentamientos en La Canebière, la avenida principal en el corazón de Marsella. En París, se vieron grandes cantidades de policías a lo largo de los Campos Elíseos, que atacaban a transeúntes. La policía de la capital informó que realizaron 126 arrestos. En Lille, al norte de Francia, se han visto fuerzas especiales de la policía en las calles. Las imágenes de la ciudad durante la noche mostraban a los bomberos apagando incendios en autos en llamas que habían sido atacados por los manifestantes.Otros funcionarios informaron a los medios locales de que se realizaron 21 arrestos en la ciudad de Lyon. Y se han confirmado choques en Niza y Estrasburgo.

Ya son cuatro las jornadas de disturbios, en los que se han movilizado especialmente los jóvenes de clase trabajadora de las periferias francesas y muchas personas de las comunidades negra y musulmana, que ven en el asesinato del joven de 17 años un crimen de odio racista por parte de la policía y una situación de desigualdad y discriminación estructural por parte del Estado francés. Las principales ciudades del país, como París, Marsella, Lyon, Nantes o Toulouse, se han visto especialmente afectadas por el caos en las noches de los últimos cuatro días, con revueltas convocadas a través de mensajes a redes sociales.

Ciudadano francés de origen argelino, el adolescente era hijo único, estudiante, trabajaba como repartidor de comida y jugaba al rugby en el club Piratas de Nanterre, en las afueras de París. Nahel era además parte de un programa de la organización Ovale Citoyen.»Era alguien que tenía la voluntad de encajar social y profesionalmente, no un chico que traficaba con drogas o que se divertía con (actos de) delincuencia juvenil», dijo el presidente de Ovale Citoyen, Jeff Puech, al medio Le Parisien. 

El joven asesinado vivía en Nanterre con su madre, Mounia, y se había matriculado en una escuela en Suresnes para ser electricista.

Este es el momento del asesinato de Nahel, grabado por un testigo:

Tras el asesinato, un paramédico que conocía a Nahel desde que era pequeño, recriminó al agente que lo asesinara por conducir sin carnet:

Según datos ofrecidos por la Prefectura de Policía el sábado por la mañana, 120 personas fueron detenidas durante la noche en París, frente a las 400 del día anterior. En toda Francia se registraron 1.311 personas detenidas. La violencia urbana se reanudó en la región de Île-de-France. Se incendió el ayuntamiento de Persan, en Val d’Oise, y se destruyeron la comisaría municipal y el centro de supervisión urbana. Fue en esta ciudad donde, hace siete años, Adama Traoré murió asfixiado por agentes de policía, convirtiéndose en una víctima emblemática de la violencia policial. El Ministro de Asuntos Urbanos visitó el lugar el sábado.

En Nanterre, la ciudad donde fue tiroteado el joven Nahel, se desplegó la BRI (brigada de investigación e intervención). Esta es la impresionante concentración ciudadana en Nanterre este sábado, día del entierro del joven Nahel M:

Los sindicatos de policía Alliance y Unsa, en el que se aludía a la «situación perruna que prevalece desde hace diez años» y a la necesidad de luchar contra «estas plagas». «Estamos en guerra», concluía el panfleto. Un vocabulario que aumenta la tensión, mientras el gobierno sólo da una respuesta represiva y judicial.