Después de diez años de procesos judiciales la reclamación de paternidad de un vecino de Sevilla puede ver la luz. Un juez ha ordenado la exhumación de cinco cadáveres del cementerio de Morón de la Frontera. El demandante asegura que uno de ellos pertenece a su padre.

José Luis Malagón tiene en la actualidad ochenta años. En 2013 inició el proceso judicial de paternidad. Hace tres años se abrió el mausoleo en donde están los restos de su presunto padre, pero los huesos que se analizaron en busca de ADN pertenecían a una mujer. Ahora, el titular del juzgado número 2 de Morón de la Frontera ha desestimado el recurso presentado por familiares de aquel para evitar que se desentierren hasta cinco cadáveres, que determinen si uno corresponde al progenitor del demandante. Se trata de un extremo excepcional en casos de demanda de paternidad.

Una vez realizadas las pruebas de ADN, el siguiente paso será la celebración de un juicio, que en estos diez años ya ha contado con dos sesiones.

Si la ciencia da la razón a la persona reclamante, esta recibiría las dos terceras partes de la herencia del que se corroboraría que fue su padre, un hombre que era muy conocido en Morón de la Frontera y que gozaba de un desahogado patrimonio.