El rey emérito vuelve a estar en el punto de mira. Durante la investigación en Suiza llevada a cabo por el fiscal Yves Bertossa sobre su presunta fortuna oculta, se ha descubierto una cuenta en Andorra a la que está vinculado…
_El rey emérito vuelve a estar en el punto de mira. Durante la investigación en Suiza llevada a cabo por el fiscal Yves Bertossa sobre su presunta fortuna oculta, se ha descubierto una cuenta en Andorra a la que está vinculado, lo que pone en jaque sus dos regularaciones fiscales anteriores. El depósito estuvo abierto más de una década en el banco Andbank, según ha adelantado este martes 'El Confidencial'. Juan Carlos I controlaba esta cuenta, cerrada en 2016, supuestamente a través de una sociedad dirigida por testaferros, Stream S. A., que fue disuelta el pasado 4 de mayo.
Precisamente, en ese mismo mes de mayo la Agencia Tributaria notificó al abogado del rey emérito la apertura de una inspección fiscal para verificar las dos regularizaciones voluntarias que llevó a cabo don Juan Carlos desde que la Fiscalía del Tribunal Supremo abriese diligencias de investigación en junio de 2020.
El organismo dependiente del Ministerio de Hacienda, que aporta peritos a las diligencias abiertas por el Ministerio Público, dio este paso para examinar si las aportaciones tributarias son correctas, es decir, veraces y completas. Por este motivo, pidió información al contribuyente relativa a la procedencia del dinero de estas entregas: casi 700.000 euros en la primera y unos 4,4 millones de euros en la segunda.