Morón
El Museo de la Cal de Morón de la Frontera confía en superar este año las 4.000 visitas
El Museo de la Cal confía en concluir 2012 superando las 4.000 visitas: cifra que llegaría casi a duplicar las 2.500 registradas durante el ejercicio anterior….
El Museo de la Cal confía en concluir 2012 superando las 4.000 visitas: cifra que llegaría casi a duplicar las 2.500 registradas durante el ejercicio anterior.Así lo ha manifestado Manuel Gil, responsable de la instalación y presidente de la asociación cultural Hornos de Cal de Morón, que la gestiona.
Se trata de una iniciativa promovida por un grupo particular a comienzos de la pasada década: “Sin embargo, aunque las obras concluyeron en 2007, no podíamos comenzar a actuar por falta de presupuesto”, recuerda Gil, añadiendo que el edificio estuvo tres años cerrado. Fue a partir de 2010 cuando la Dirección General de Economía Social, para hacerlo viable, lo integró en la Red CIE (Centros de Interpretación Etnográfica): una iniciativa en la que emprendedores vinculados al medio natural impulsan con su actuación el patrimonio cultural y etnográfico de las zonas donde intervienen.
Así ha ocurrido con el Museo de la Cal. Desde 2010, la Consejería ha invertido casi un millón de euros en el desarrollo de los seis centros asociados, y se prevé la inversión de otros 450.000 euros para el próximo ejercicio económico. Estas dotaciones presupuestarias, aparte de a la organización de los espacios museísticos, se destinan a la consolidación de los centros seleccionados como generadores de la actividad económica. Para ello se elabora un plan integral de actuaciones donde se analizan las posibilidades y el potencial de cada uno de estos espacios.
En el caso concreto del Museo de la Cal, una de las medidas adoptadas pasa por salvaguardar el oficio tradicional de calero: “Hace años había en Morón más de cincuenta hornos; ahora sólo quedan tres”, recuerda Manuel Gil. Sin embargo, el museo ha permitido consolidar los ocho puestos de trabajo generados y desarrollar acciones formativas no sólo para la preparación de futuros caleros, sino también para el conocimiento del producto y de la actividad por parte de todos. Sin duda, un hito en este sentido fue, a finales de 2011, la inclusión de la actividad calera de Morón en la lista de Buenas
La progresión del centro ha sido bastante dinámica. Así, las mil visitas registradas durante su primer año de vida se convirtieron en 2.500 a finales de 2011, y la previsión para 2012 pasa por casi duplicar esa cifra: “Todo ello en una zona que hasta ahora no tenía una especial relevancia turística”, matiza Gil. Sin duda el desarrollo de nuevos proyectos, como los previstos por sus gestores para los próximos meses, contribuirán a incrementar paulatinamente el número de visitas.