Opinión
CARTAS AL DIRECTOR.Morón de la Frontera ¿lugar apropiado para sanar?
Los niñ@s bielorrus@s han vuelto a nuestro pueblo a sanarse otro año más. A pesar de la crisis, la generosidad de mis vecin@s queda patente
Los niñ@s bielorrus@s han vuelto a nuestro pueblo a sanarse otro año más. A pesar de la crisis, la generosidad de mis vecin@s queda patente no dejando a ninguno atrás. No pertenezco a la Asociación Azahar pero les doy las gracias por su gran labor solidaria y humanitaria, demostrando así que querer es poder. Yo formo parte de la Asociación Vecinal el Pantano donde los niños son protagonistas de gran parte de los eventos que organizamos.
Organizar algo para niñ@s es una ardua tarea pero vale la pena meterse en estos embrollos cuando lo que tú haces provoca momentos de felicidad en sus vidas. Por ese motivo y además por ser madre entiendo el empeño de la Asociación Azahar de seguir trayendo a es@s pequeñ@s un año tras otro para sanearl@s y devolverles la salud que le arrebataron la negligencia de sus mayores. Ningún niñ@ debería sufrir las consecuencias de la torpeza y codicia de gobernantes, ni empresarios.
Como miembro de la plataforma contra el crematorio junto a las casa en Morón de la Frontera conozco perfectamente las consecuencias que pagaran nuestr@s hij@s al estar expuestos a los contaminantes que genera un crematorio. Ya hace un año que comenzó a funcionar los hornos del crematorio de Memora a pesar de las protestas y quejas de l@s vecin@s que informaron del peligro que corríamos si se permitía semejante locura. A pesar de los informes y reuniones con el anterior alcalde, desoyendo a sus vecin@s, firmó la licencia de actividad.
Durante este año se han ido acumulando en nuestro pueblo los contaminantes generados y expulsados por la actividad del crematorio ya que el radio de acción de las emisiones son de 2 km. Cuando pienso en l@s niñ@s bielorrusos que vienen para recuperar la salud perdida por la contaminación en su país natal me pregunto, si no tendremos que llevar a nuestros hijos a un lugar más sano para intentar paliar las consecuencias de la contaminación que se acumula día tras día en el aire que respiramos.
Tal vez con el tiempo no consideren apropiado que vuelvan los niños bielorrusos a nuestro pueblo por considerarlo zona contaminada.