Detenido en La Puebla un joven de 18 años por matar a un hombre en Marchena atropellándolo cinco veces

Provincia. La Guardia Civil lo detuvo  horas después en La Puebla de Cazalla como presunto autor del crimen. El agresor se subió incluso a la acera para embestir reiteradamente a la víctima…

Provincia. La Guardia Civil lo detuvo  horas después en La Puebla de Cazalla como presunto autor del crimen. El agresor se subió incluso a la acera para embestir reiteradamente a la víctima.

Un joven de 18 años mató ayer presuntamente a un hombre de 40 al que atropelló reiteradamente con el coche de su madre. Los hechos ocurrieron en Marchena, donde residían tanto la víctima como el presunto autor del crimen. Éste se dio a la fuga tras el atropello, pero fue detenido horas después por la Guardia Civil en La Puebla de Cazalla. El joven permanece en las dependencias del instituto armado de este municipio a la espera de ser puesto a disposición del juzgado número 1 de Marchena, que investiga lo ocurrido. 

En principio se le imputan los delitos de homicidio doloso y de omisión del deber de socorro. Mientras tanto, la investigación continúa abierta para tratar de determinar qué llevo al presunto homicida a embestir con el coche de su madre en reiteradas ocasiones a la víctima, así como a averiguar qué relación previa existía entre ambos. El difunto, un hombre de 40 años identificado mediante las iniciales F. J. L. M., deja mujer y dos hijos. Era natural de Sevilla pero residente en Marchena, donde era muy conocido porque su padre es guardia civil retirado. 

Los hechos ocurrieron a las doce y cuarto de la noche del domingo al lunes. El joven conductor embistió al menos cinco veces a la víctima en tres calles distintas, hasta que ésta cayó malherida en la calle Madre Carmen González de Marchena, a la altura de la confluencia con la calle 28 de febrero. Según explicaron algunos testigos al diario digital Arahal Información, todo comenzó en una pequeña escalera que separa las calles Federico García Lorca y José Montes de Torres, en las inmediaciones del polideportivo municipal. 

Según los testigos, el autor del homicidio y el fallecido se conocían de antemano y frecuentaban un parque cercano. La noche del domingo al lunes, el joven Adán L. G. vio al hombre al que atropelló después sentado en la escalera y quiso subir el coche a la misma para golpearle. Al no lograrlo, dio marcha atrás, chocando contra varios vehículos aparcados y embistió al hombre, que se subió a la acera para intentar ponerse a salvo. El conductor subió el turismo que conducía, un Peugeot 307 de color blanco, a la acera y volvió a pasar por encima del hombre al que perseguía. Éste volvió a levantarse y logró caminar unos metros más hacia otra calle, hasta que el joven le propinó varios golpes más con el coche y lo derribó. 

Varios testigos declararon ayer a la Guardia Civil que el homicida pasó varias veces con el vehículo por encima del hombre al que atropelló. Mientras lo perseguía, siempre según el relato de estos testigos, el joven conductor le decía a gritos que tenía que pagarle un dinero que le debía. Después de dejarlo malherido en la calzada, el sospechoso se dio a la fuga con el Peugeot 307. Fue en ese momento cuando varios vecinos, que se habían metido en sus casas para refugiarse ante la posibilidad de que resultaran heridos por la pérdida del control del coche del homicida, telefonearon al servicio de emergencias 112. 

La central de este teléfono derivó el aviso la Guardia Civil, la Policía Local de Marchena y el servicio de emergencias sanitarias del 061. Mientras llegaban, una vecina que es profesional sanitaria trató de practicarle una reanimación cardiopulmonar a la víctima, que estaba incosnciente y sin constantes vitales. Una patrulla de la Policía Local de Marchena fue la primera en llegar hasta el lugar en el que yacía el hombre. Luego llegó la UVI móvil del 061, pero los trabajadores sanitarios sólo pudieron certificar la defunción. 

La Guardia Civil comenzó a recoger declaraciones de los distintos testigos y logró identificar en cuestión de minutos al presunto homicida. La comisión judicial decretó el levantamiento del cadáver alrededor de las dos y cuarto de la madrugada, aproximadamente dos horas después del crimen. La fuga de Adán L. G. duró menos de diez horas. El joven fue localizado poco antes de las diez de la mañana en La Puebla de Cazalla, localidad situada a unos 20 kilómetros de Marchena. La Guardia Civil tenía tanto la matrícula del vehículo como la identificación del joven, de ahí que su detención fuera casi inmediata. 

Tras su arresto, el presunto homicida fue trasladado a las dependencias del instituto armado en este municipio, donde permanecía a la hora de cierre de esta edición, a la espera de que hoy sea llevado a los juzgados de Marchena. Familiares del detenido pasaron ayer por la sede de la Policía Local, donde prestaron declaración. La Guardia Civil también interrogó a numerosos testigos del atropello antes de tomar declaración al sospechoso. Los investigadores creen que el agresor y la víctima pudieron mantener una discusión antes del atropello. Sobre las causas de la misma, todas las hipótesis están abiertas. El hecho de que el joven tenga antecedentes por menudeo y que se le hallara en una balanza de precisión en su poder cuando fue detenido avala la teoría de que el móvil del crimen pudo ser un ajuste de cuentas relacionado con las drogas.