La crisis no la podemos pagar siempre los mismos. Por Curro Copado

Vivimos en Estado de Alarma por una crisis sanitaria, sin precedentes, con una planificación nefasta e incoherente, que pone en evidencia las carencias del capitalismo.

Vivimos en Estado de Alarma por una crisis sanitaria, sin precedentes, con una planificación nefasta e incoherente, que pone en evidencia las carencias del capitalismo.

 A la ciudadanía nos marcan unas normas a cumplir para que no se propague el virus.

¡Quedaros en casa! ¡Los que trabajan no! ¿Me lo expliquen? Como se puede compaginar estar en cuarentena y tener que ir a trabajar ¿teletrabajo? Un ordenador sí, pero y una hormigonera ¿te la puedes llevar al salón de tu casa?.

Hay que tener claro que tiene que haber personas trabajando, ya que todo lo que se produce o funciona es gracias a la clase trabajadora, ésta es la que levanta el país en todos los aspectos. Pero estas personas tienen que tener todos los medios de seguridad al alcance sin restricción alguna y con abastecimiento suficiente, cumpliendo las normas de seguridad a rajatabla.

 En una crisis sanitaria no se puede seguir produciendo como si se fuera a acabar el mundo, ahí entra la avaricia del capital, el cual, sólo quiere beneficios, utiliza una pandemia para enriquecerse todo lo posible, sin importarles para nada los que le generan sus beneficios (la clase trabajadora) mientras ellos (los grandes empresarios) están resguardados en sus búnkeres.

Los trabajadores y trabajadoras no tendrían que estar preocupados por cómo van a pagar, la hipoteca, préstamos, luz, agua, gas e impuestos, ni cómo van a llenar la nevera, esas son también medidas que se tienen que establecer, al igual que las sanitarias.

Los trabajadores y trabajadoras que hagan falta, pues a trabajar, con todas las medidas de seguridad. Los demás en sus casas, con sus necesidades cubiertas y si va para largo, se planifica, haciendo los relevos  y turnos que hagan falta.

Es inhumano ver cómo todo el que tiene que salir a trabajar, tiene que estar preocupado por el permiso para ir en el coche, preocupado por si lo van a echar, además de tener la posibilidad de contagiarse del virus teniendo información o más bien, sobre información, que lo único que hace es crear más confusión si cabe ( ni la autoridad lo tiene claro).

No vale decir: vamos a inyectar 200.000 millones para paliar esta crisis, cuando los mayores benefactores son los grandes empresarios, que el Estado les facilita los ERTES con la complicidad de los sindicatos mayoritarios, quitándole la Seguridad Social y el trabajador/a deja de recibir un 30% menos de su salario.

Viviendo en un sistema capitalista como en el que vivimos, decadente, senil y putrefacto, saliente de una crisis (eso dicen) y encaminado a otra crisis económica todavía más terrorífica que la del 2008, la cual pagamos y estamos pagando los mismos de siempre, vemos que la sanidad privada sigue ahí, como si con ella no fuera, pero te cobran 300 euros por la prueba del coronavirus, y si das positivo, te mandan a la pública ¿cuándo va a expropiar el Estado la sanidad privada con la falta que hace y ponerla al servicio de la sociedad? ¡Lo privado no se toca!

¡Seguid la normas de seguridad! !Cumplid las reglas!

Los bancos nos siguen llamando recordándonos que tenemos una letra de la hipoteca "pendiente" y dado el estado en el que nos encontramos, nos dan la facilidad de hacer el pago en el momento, con tarjeta y así "evitar contagios". Los bancos también siguen sus reglas (no se saltan ni una coma).

La conclusión de todo esto es que hay un protocolo y normas impuestas ante un Estado de Alarma, por un gobierno "progresista" que les importa más la crisis económica que la sanitaria, o sea, miran más por el IBEX35, que por el bien común de la gran mayoría social que es la clase trabajadora.

TODA LA SANIDAD PRIVADA TIENE QUE ESTAR AL SERVICIO DE LA SANIDAD PÚBLICA.

SOCIALISMO O BARBARIE

Curro Copado