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Morón

Entrevista a Ismael Mena Pérez, de Quesos Mena-Artesanos de Morón, un queso de cabra para volverse loco

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Ismael Mena Pérez es un joven emprendedor de 32 años, natural de Morón de la Frontera.  Auxiliar veterinario y maestro quesero ha logrado montar una quesería en la Vereda del Congosto número 2, aunque la tienda para la venta física está ubicada en la calle Vereda del Ancha nº29, en Morón…

_Ismael Mena Pérez es un joven emprendedor de 32 años, natural de Morón de la Frontera.  Auxiliar veterinario y maestro quesero ha logrado montar una quesería en la Vereda del Congosto número 2, aunque la tienda para la venta física está ubicada en la calle Vereda del Ancha nº29, en Morón.

 

Su empeño no es improvisado. Desde el año 2013 viene pensando en utilizar la leche de las cabras de una explotación ganadera propia. Sobre 2016 empezó a darle forma y a iniciar los trámites administrativos necesarios hasta que el proyecto arrancó en 2021. Como verán a continuación los principios nunca son fáciles pero con un producto de tal excelencia –les habla alguien que ya los ha probado y repetirá- como el que tiene entre manos Ismael, el camino -de seguro- siempre es más fácil.

 

Pregunta de La Voz de Morón.- Ismael, ¿te ha costado bastante esfuerzo arrancar con la quesería?, ¿mucho papeleo?

 

La verdad es que sí, bastante esfuerzo, tanto económico como de tema de papeleo ya que al tener que tratar con Sanidad, siendo este un producto lácteo que es perecedero y demás, pues sí, me ha costado bastante.  Empecé sobre 2016 o 2017 con la idea de montarla y poco después comencé con el papeleo. Al menos dos años he estado liado.

 

LVM.-Has contado con apoyo de alguien?

 

He contado con la ayuda de la familia y de compañeros de otras queserías, de grupos de apoyo a queseros artesanos. La familia me ha ayudado en todo, tanto en apoyo económico, como en trabajo,  también dándome ánimos en aquellos momentos en los que no se veía salida.

 

No quiero dejarme detrás a Félix Ángel Gamero , el veterinario, director de la OCA de la Serranía Suroeste que me echó –y me echa- en el tema de la ganadería y también José Manuel Amores, la persona encargada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Morón que también puso todo de su parte para que el proyecto saliera adelante.

 

Su madre Isabel, nos cuenta además que Francisco Mena, el padre de Ismael, siempre le ha apoyado en esta aventura y ella ha estado ahí desde el principio para que lo ha necesitado, ya sea para llevar el producto a carnicerías u otras tiendas o para lo que haya sido necesario.

 

 

LVM.-Que aceptación están teniendo los productos?, ¿Qué tipos de quesos elaboráis?

 

La verdad que mejor de lo que esperaba, está teniendo bastante aceptación. Hasta ahora todo el que lo prueba va repitiendo y además todo el mundo está recalcando que es un queso diferente y que está bueno. Yo he buscado un producto que se parezca a lo que se hacía antes y se ha hecho siempre. Nada industrial.

 

Ahora mismo tenemos quesos frescos en diferentes formatos, uno más pequeño de unos 300 gramos y otros de 450 gramos, y quesos madurados. Dentro de los madurados los hago con aceite, con pimentón, con romero y ahora estamos probando uno nuevo -estamos afinando algunas cositas-  con Pedro Ximénez, algo distinto y que llama la atención y que de sabor,  está bastante bien por el contraste, merece la pena probarlo.

 

LVM.-Piensas comercializar los quesos en Morón o venderlos por la comarca o más allá?

 

Ahora mismo estamos en Morón en varias tiendas y a la espera de que se abran algunos comercios con los que lo tengo hablado. Poco a poco la idea es salir. Con los frescos no, se quedaran a nivel local porque son más complicados, no pueden perder la cadena de frío y necesitan de otro tratamiento y otros transportes.

 

La idea con los madurados también es acudir ferias e ir dándolos a conocer fuera.

 

LVM.-Hay gente que nos comenta que tus quesos le sientan especialmente bien al estómago, en contraste con otros industriales. ¿Nos podrías explicar porque pasa esto?

 

Lo principal es que la gran mayoría de los quesos, de los productos lácteos que consumimos son de vaca, la leche de cabra –no lo digo yo, lo dicen los estudios- es de las más parecidas a la leche materna, leche humana, entonces el cuerpo lo asimila mucho mejor, incluso las grasas se digieren mucho mejor porque son moléculas más pequeñas.

 

Con respecto a los quesos, lo normal es que los industriales al proceder la leche de muchas ganaderías tienen que hacerle unos tratamientos térmicos muy agresivos que, podemos decir, “mata a la leche” y al final lo que hacen es añadirle cosas.

 

Estos quesos artesanales al estar elaborados con leche del mismo rebaño no hay que ser tan agresivos con ellos, el tratamiento es más suave, siempre dentro de la normativa de Sanidad para que no haya ningún peligro de salud de ningún tipo, pero conservan más las propiedades de la leche.

 

Muchas de las intolerancias a la lactosa y demás vienen provocadas por los tratamientos términos y por la mano de la industria.

 

LVM.-Además del producto estrella, en la tienda ofreces otros servicios como cereales, piensos, accesorios para mascotas, plantas, etc.. 

 

En nuestra tienda de la Vereda Ancha, 29, desde enero tenemos semillería.  Pienso para mascotas y ganadería y cualquier accesorio para animales que necesiten.  Además cualquier cuestión de este tipo que una persona no encuentre yo la puedo buscar y traérsela para que la tengan aquí.  

 

LVM.-Puedes dirigirte a los posibles clientes con cualquier mensaje que creas conveniente.

 

Simplemente que por lo menos le den la oportunidad al producto, que lo prueben. Yo soy consciente de que es algo diferente, porque no es un queso plano, no va a tener el mismo sabor y va a variar dependiendo de la época del año, va a variar dependiendo del animal, de un grado a otro durante la maduración, etc.. pero al menos que le den la oportunidad de probarlo.

 

Yo sé que al que le guste el queso le va a volver loco.

 

Bueno,  y que apoyen lo que se hace por aquí, ya sea al que haga vestidos como al que haga comida, que le demos vida a lo nuestro.

 

 

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