Morón
Las aceitunas negras españolas quedan fuera de las negociaciones comerciales entre la UE y EEUU
Los aranceles adicionales de Estados Unidos a la importación de aceitunas negras de mesa españolas, cuyos mayores implicados son las industrias moronenses…
Los aranceles adicionales de Estados Unidos a la importación de aceitunas negras de mesa españolas, cuyos mayores implicados son las industrias moronenses Ángel Camacho Alimentación y Aceitunas Guadalquivir, quedarán fuera de las negociaciones comerciales que el presidente norteamericano Donald Trump y el presidente Jean-Claude Juncker pactaron este miércoles, según han informado fuentes comunitarias.
Este asunto, por tanto, no será parte de la «nueva fase» que ambos mandatarios anunciaron tras su reunión en la Casa Blanca, que supone una tregua en la guerra comercial abierta entre ambas partes tras la aplicación de aranceles adicionales a las importaciones de acero y aluminio por parte de Washington.
Un alto funcionario europeo ha explicado que las investigaciones 'antidumping' y 'antisubsidios' de Estados Unidos sobre la aceituna negra española forman parte de las llamadas «medidas de defensa comercial» que «nunca se negocian» y sobre las que cada parte «mantiene su autonomía».
Sin embargo, la UE considera que los aranceles adicionales a este producto español son «inaceptables» y sigue estudiando la posibilidad de elevar el caso a la Organización Mundial de Comercio (OMC).
En esta cuestión, Bruselas considera indispensable seguir defendiendo que las ayudas que otorga a los agricultores y los ganaderos europeos en el marco de la Política Agraria Común (PAC) son legales según las normas pactadas en la OMC por se desacopladas, es decir, por no depender del nivel de producción.
«Seguimos extremadamente vigilantes», han señalado las mismas fuentes al ser preguntadas por los efectos que podría tener la investigación estadounidense de las aceitunas de mesa españolas sobre el conjunto de los fondos agrícolas europeos.
Este mismo jueves la Comisión de Comercio Internacional de EEUU ha adoptado la resolución definitiva sobre los efectos de las importaciones de aceituna negra sobre el sector californiano. El último paso es que el Departamento de Comercio del país norteamericano publique oficialmente el próximo 31 de julio el arancel definitivo a este producto, que será del 34,75%.
Productos agrícolas
En cualquier caso, todos los productos agrícolas quedarán excluidos de las conversaciones entre Bruselas y Washington, con la excepción de la soja, el único producto agroalimentario sobre el que hablarán ambas partes, han precisado fuentes comunitarias.
En la declaración conjunta pactada por Juncker y Trump, la UE expresa su deseo de incrementar sus compras de este producto a EEUU, pero un alto funcionario ha explicado que el bloque comunitario «no comprará más de lo que necesita».
Este aumento de las importaciones de granos de soja se explica por «fuerzas de mercado» y por el hecho de que EEUU tenga que buscar nuevos mercados después de que China haya elevado los derechos de aduana a este producto. «La soja estadounidense es ahora más atractiva que la brasileña o la argentina», han añadido las mismas fuentes.
Bruselas también niega que se haya comprometido oficialmente a adquirir más gas natural licuado (GNL) a Estados Unidos, sino que ha mostrado su intención de hacerlo. «Es una declaración de intenciones», matizan fuentes comunitarias.
La voluntad de aumentar las compras de soja y gas natural licuado forman parte de los cuatro puntos acordados este miércoles entre Trump y Juncker para evitar una escalada en la guerra comercial y abrir una nueva hoja de ruta de conversaciones para avanzar hacia una «nueva fase» en su relación comercial.
El compromiso más importante es trabajar para reducir los aranceles, las barreras no arancelarias y los subsidios a los productos industriales, excluyendo los automóviles y los componentes de automóvil. También se han comprometido a impulsar una reforma en las normas de la UE.
En este contexto, la UE y EEUU no adoptarán aranceles adicionales mientras perdure este nuevo escenario de diálogo, como los que Trump quería aplicar a los coches. También se han comprometido a revisar los aranceles adicionales al acero y aluminio, aunque sin detallar un calendario claro de retirada.