La Iglesia inmatriculó bienes inmuebles con «incidencias», también en la comarca de Morón

“Inmatriculados por error”,  el eufemismo moderno que la Iglesia utiliza en lugar de la palabra que describe la acción de quedarse uno con lo que no es suyo, acción protagonista en los mandamientos séptimo, octavo y décimo (no robarás, no darás falso testimonio ni mentirás y no codiciarás los bienes ajenos).

 

La Archidiócesis de Sevilla inmatriculó en la provincia ocho bienes con "incidencias", según consta en el informe presentado por la Conferencia Episcopal al Gobierno central en el que reconoce que cerca de un millar de bienes inmuebles que aparecen en la lista de activos fueron “inmatriculados por error”, que es el eufemismo moderno que la Iglesia utiliza en lugar de la palabra que describe la acción de quedarse uno con lo que no es suyo, acción protagonista en los mandamientos séptimo, octavo y décimo (no robarás, no darás falso testimonio ni mentirás y no codiciarás los bienes ajenos).

 

 

De los 295 inmuebles que según el informe del Gobierno inmatriculó la Archidiócesis de Sevilla, acogiéndose al artículo 298 del Reglamento Hipotecario aprobado por Real Decreto, se constatan "incidencias" en ocho casos concretos, explican fuentes del Arzobispado a Europa Press.

 

 

"Consta la inmatriculación por parte de la Archidiócesis de cinco inmuebles a favor de órdenes o instituciones religiosas titulares de los mismos y se incluyen tres inmuebles adquiridos por otros títulos diferentes a la inmatriculación, como el caso de la compraventa, la cesión municipal y el expediente de dominio", señalan las citadas fuentes.

 

 

Esos inmuebles, además de Santa Inés y San José en la capital, Gines (un espacio de uso específico religioso cedido al Ayuntamiento), San Juan de Aznalfarache (una casa), están dispersos por toda comarca de Morón:  en Marchena (convento de la Purísima Concepción), Arahal (monasterio Nuestra Señora del Rosario), Carmona (monasterio de la Santísima Trinidad), , La Puebla de Cazalla (una casa) . Y lo que no sabremos.