Finalizó la tortuosa obra de la Calle Fuente Nueva, tras 3 meses de molestias para padres y madre de alumnos

Morón. Padres y madres de alumnos del IES Fuente Nueva y el CEIP El Llanete no han entendido porque la obra no se ha llevado a cabo en el período vacacional de los alumnos…

Morón. Padres y madres de alumnos del IES Fuente Nueva y el CEIP El Llanete no han entendido porque la obra no se ha llevado a cabo en el período vacacional de los alumnos

La semana pasada finalizaban las obras de mejora de la red de saneamiento de la calle Fuente Nueva, una obra que ha contadocon una inversión de 144.000 euros a cargo del Plan Supera de la Diputación de Sevilla. La calle Fuente Nueva es una de las vías principales del barrio San Francisco, donde se encuentran ubicados numerosos negocios y dos centros educativos.

Ignacio Cala, delegado de Urbanismo, ha señalado que esta calle “tenía importantes problemas de saneamiento, de hundimientos, porque estaba muy deteriorada la red de alcantarillado y saneamiento, y además esto provocaba numerosos baches con peligro para la circulación, lo que también redundaba en peligro para los peatones”

Pese a que el delegado de Urbanismo ha destacado que en esta obra “hemos conseguido recortar el plazo de ejecución de la obra en más de un mes y medio, con lo cual las molestias a los vecinos han sido muchísimo menos de lo que en un principio podrían haber sido”, no han sido pocas las críticas que los vecinos de la calle han realizado sobre la gestión en el desarrollo de la obra.La oposición ha llegado a recomendar al equipo de gobierno que tome esta actuación como ejemplo de cómo no llevar a cabo una obra.

Padres y madres de alumnos del IES Fuente Nueva y el CEIP El Llanete, los dos centros que están ubicados en la citada calle, expresaron a principios de la obra su malestar por las molestias y la amenaza para la seguridad de los niños a la salida del colegio debido a la presencia de maquinaria pesada y zanjas. Muchos de ellos no entendían porque no se hacía esta obra en período vacacional.

La falta de aparcamientos en la zona y el difícil acceso que por sí tiene la zona, han hecho que la recogida de los menores haya sido una tortura para los padres.