Familias de Morón esperan pruebas de ADN en la fosa de La Puebla para dar con familiares fusilados por el franquismo

Morón. La Junta de Andalucía anunció hace unos días a través de la Dirección General de Memoria Democrática 37 nuevas acciones en municipios andaluces,…

Morón. La Junta de Andalucía anunció hace unos días a través de la Dirección General de Memoria Democrática 37 nuevas acciones en municipios andaluces, entre los que se encuentra La Puebla de Cazalla. En este municipio concretamente se desarrollarán trabajos de identificación genética de los restos encontrados en la fosa del cementerio municipal.

Se tiene constancia de la procedencia de las personas allí enterradas, fusilados y desaparecidos por el franquismo durante la Guerra Civil y la Posguerra, que provenían no sólo de La Puebla de Cazalla, sino de varias poblaciones del entorno, entre ellas  Morón de la Frontera, Lantejuela, Villanueva de San Juan y Marchena. Se estima que el total de víctimas que yacen en este emplazamiento estaría entre un mínimo de 52 y un máximo de 159 personas.

En este contexto, el historiador e investigador moronense Miguel Guardado, coautor de la obra “Morón, consumatum est. 1936-1953 : historia de un crimen de guerra”, trabajo que aclara con documentos y testimonios directos lo que realmente pasó en Morón en 1936, antes, durante y después de la ocupación franquista,  nos informa que  estas acciones de exhumación e identificación de los restos “es una reivindicación largamente pretendida por un grupo de personas que han trabajado desde el año 2006 con el propósito de abrir las fosas comunes del cementerio municipal de esa localidad, extraer de allí los restos de los represaliados del franquismo e identificarlos para que sus familiares puedan darles una sepultura digna de una persona”.

Según los datos de los que se dispone, en La Puebla de Cazalla fueron asesinadas en el verano de 1936 y en el mes de febrero de 1937 más de un centenar de personas, pertenecientes muchas de ellas a localidades próximas y que fueron llevadas allí para ser fusiladas. Entre ellas hay varios vecinos de Morón de la Frontera.

En este contexto, nos añade Miguel, “son varias las personas de Morón que han donado su ADN para que el laboratorio encargado de realizar los análisis pertinentes pueda contrastarlo con los de los restos allí exhumados”.

De esta manera son varias las familias de Morón que esperan con ansiedad poder recoger los huesos de su familiar y cerrar así el duelo.